Tratamiento para la pinguécula
¿cómo pueden ayudar las gafas de sol?
La pinguécula es una afección ocular que puede desarrollarse como resultado de la exposición a los rayos ultravioleta del sol. Es bastante común, especialmente en climas más cálidos, como en España. Por lo general, la pinguécula no causa ningún síntoma más que un cambio en la apariencia del blanco del ojo. Aquí, analizamos los tratamientos disponibles para la pinguécula y cómo evitar que se desarrolle.
¿Qué es la pinguécula y el pterigión?
La pinguécula y el pterigión son acúmulos benignos que se desarrollan cerca de la córnea (el blanco del ojo). Aunque son inofensivos, estos acúmulos pueden producir marcas superficiales y, ocasionalmente, irritación ocular. El pterigión, a veces, también puede afectar u obstruir tu visión.
Algunas investigaciones han demostrado que existe un fuerte vínculo entre la exposición prolongada a la radiación ultravioleta y la pinguécula.1 Las personas que trabajan o pasan mucho tiempo al aire libre, algo que sucede mucho en los países mediterráneos, tienen, por lo tanto, un mayor riesgo de desarrollar estas anomalías.1 Por eso, es especialmente importante protegerse los ojos del sol en lugares como España.
Tratamientos para la pinguécula
La pinguécula no afecta a la visión, por lo que no requiere ni se recomienda la cirugía. Algunas personas pueden experimentar irritación ocular debido a este problema, pero se puede controlar con lágrimas artificiales - un tipo de gota para los ojos que imita las lágrimas que estos producen de forma natural.2 Las gotas lubricantes para los ojos también se usan para aliviar síntomas como la sensación de arenilla en el ojo.3 Si hay enrojecimiento o hinchazón, tu oftalmólogo puede recetarte gotas oculares con esteroides junto con lágrimas artificiales.3 En el raro caso de que la pinguécula cause irritación grave, se puede considerar la extirpación quirúrgica.
Tratamientos para el pterigión
Un pterigión puede causar síntomas como picazón, ardor y lagrimeo. Un oftalmólogo generalmente recomendará la extirpación quirúrgica del pterigión si crece lo suficiente como para afectar tu visión. A veces, se trasplanta una pequeña porción de tejido ocular normal en el área para reducir las posibilidades de que el pterigión vuelva a desarrollarse.3
Gafas de sol para controlar la pinguécula y el pterigión
Unas gafas de sol de buena calidad, especialmente monturas envolventes o con lentes UV400, pueden brindar protección contra el sol y reducir el impacto de la radiación UV en los ojos. Como tales, pueden ser útiles para controlar tanto la pinguécula como el pterigión a lo largo del tiempo. Por ejemplo, unas gafas de sol de alta calidad, al formar una barrera protectora contra residuos, polvo y viento, pueden ayudar a reducir la probabilidad de que una pinguécula o un pterigión se inflame o se irrite.
Vale la pena recordar que los rayos ultravioleta del sol pueden penetrar la capa de nubes. Por lo tanto, la protección en exteriores es necesaria incluso cuando no hay luz solar directa. Las lentes fotocromáticas, que están diseñadas para proteger los ojos oscureciéndose según el nivel de luz solar, pueden ser útiles en tales situaciones. Las personas que han desarrollado una pinguécula en el ojo también pueden beneficiarse de las lentes polarizadas, ya que minimizan el deslumbramiento de la luz del sol.
Si un pterigión te está causando mucho malestar o está interfitiendo en tu visión, se puede extirpar con cirugía. Sin embargo, el principal desafío para que el tratamiento quirúrgico del pterigión sea exitoso es la recurrencia, que ocurre hasta en un 40% de los casos, más aún en personas menores de 40 años. Como tal, la mejor manera de evitar que la pinguécula y el pterigión vuelvan a desarrollarse es evitar la luz solar, la sequedad y el polvo. 3, 5
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Consejos sobre gafas de solReferencias
1. Behar-Cohen F, Baillet G, de Ayguavives T, et al. Ultraviolet damage to the eye revisited: eye-sun protection factor (E-SPF®), a new ultraviolet protection label for eyewear. Clin Ophthalmol. 2014;8:87–104. [Online].
Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3872277/
2. Jaros PA, DeLuise VP. Pingueculae and pterygia. Surv Ophthalmol. 1988 Jul-Aug;33(1):41-9. [Online]. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/3051468 [Último acceso 11 de diciembre 2019].
3. American Academy of Ophthalmology. (no date). Pinguecula and Pterygium. [Online]. Disponible en: https://www.aao.org/eye-health/diseases/pinguecula-pterygium-diagnosis-treatment [Último acceso 11 de diciembre 2019].
4. American Academy of Ophthalmology. (no date). Six Things to Know About Pinguecula and Pterygium. [Online]. Disponible en: https://www.aao.org/eye-health/tips-prevention/six-things-to-knowabout-pinguecula-pterygium [Último acceso 11 de diciembre 2019].
5. American Academy of Ophthalmology. (no date). Management of Pterygium. [Online]. Disponible en: https://www.aao.org/eyenet/article/management-of-pterygium-2 [Último acceso 11 de diciembre 2019].