¿Sabías que…?

Las abrasiones de la córnea pueden interrumpir tu visión y hacer que tu ojo sea más susceptible a infecciones; también pueden ser bastante dolorosas. Es importante que tu optometrista te revise el rasguño en el ojo si sientes mucho dolor, o incluso acudas a emergencias.

Síntomas de una abrasión corneal

Los signos o síntomas de un rasguño ocular incluyen:

Si experimentas alguno de estos síntomas o cambios en tu visión, es importante que te examinen los ojos lo más rápido posible.

Causas de rasguños oculares

Hay muchas formas de que se produzca una abrasión corneal. Cualquier cosa que entre en contacto con la superficie del ojo, por pequeña que sea, puede causar lesiones. Las causas comunes incluyen partículas en el aire, como polvo o arena, y cualquier objeto que golpee el ojo abierto, por ejemplo, en juegos con pelota o haciendo bricolaje.

Los ojos secos pueden aumentar el riesgo de abrasión corneal debido a la insuficiente lubricación del ojo. Las zonas secas hacen que la superficie de la córnea se vuelva frágil y, por lo tanto, sea mucho más probable que se dañe, incluso al hacer algo tan simple como frotarse un ojo.

Tratamiento de la abrasión corneal

La mayoría de las abrasiones corneales se curan por sí solas lentamente durante varios días. Sin embargo, debido a que el daño de la superficie hace que el ojo sea más susceptible a infecciones, el tratamiento para un rasguño ocular puede requerir gotas o pomadas antibióticas.

Preguntas frecuentes

¿Se puede prevenir una abrasión corneal?

Sí, pero hasta cierto punto. Si notas que tienes algo en el ojo, evita frotarlo para que no se dañe más. Siempre usa gafas de protección cuando exista riesgo de daño ocular, por ejemplo, cuando trabajes en un ambiente polvoriento o entre vegetación y cuando hagas bricolaje.

Si notas que tienes algo en el ojo, parpadea un par de veces para ver si así se desplaza y, si no, enjuaga suavemente el ojo con agua limpia o una solución salina estéril. Si el dolor o la incomodidad persisten, busca atención médica.

¿Cómo de grave es una abrasión corneal?

La gravedad de una abrasión corneal está determinada por el tamaño y la posición de la abrasión y la profundidad del daño en la córnea. El dolor ocular no siempre representa la cantidad de daño, por lo que siempre es mejor que un oculista lo revise. Si bien la mayoría de los rasguños se curan solos, es posible que se infecten o formen una cicatriz, lo que podría causar un daño permanente al ojo y afectar tu visión.

¿Cuáles son los síntomas de un rasguño en el ojo?

La córnea, el área del globo ocular que se ha arañado, es muy sensible, por lo que las abrasiones corneales pueden ser muy dolorosas. Sentirás como si tuvieras algo dentro del ojo y puedes experimentar enrojecimiento ocular, ojos llorosos y sensibilidad a la luz.

¿Qué hacer si tu bebé o hijo/a se araña un ojo?

Al igual que con cualquier problema ocular o de la vista, es casi imposible que puedas saber la gravedad de la abrasión, por eso, lo mejor es que lo vea un optometrista. El optometrista puede sugerir realizar un seguimiento, un tratamiento o derivarle a un especialista si el daño es serio, pero por lo general, la mayoría de las abrasiones se curan por sí solas.