¿Sabías que…?
Una pinguécula es un pequeño bulto de color amarillento localizado solo en la conjuntiva. Si crees que tienes una pinguécula, llama a tu óptica para más información o visita a tu médico de cabecera.
Signos y síntomas de la pinguécula
La mayoría de las personas con pinguécula no experimentará ningún síntoma. Pero es posible que el abultamiento que una pinguécula crea en la superficie del ojo pueda interferir en cómo la película del lagrimal se extiende por el ojo, pudiendo causar ojo seo.
Otros síntomas de la pinguécula son, por ejemplo, el enrojecimiento o la irritación de ojos.
Causas de la pinguécula
La pinguécula se desarrolla como una parte normal del proceso de envejecimiento y la mayoría de las personas con 70 años son propensas a desarrollarla.
La causa principal de la pinguécula es una exposición prolongada a la radiación ultravioleta del sol. Así que, si pasas mucho tiempo en el exterior, tienes más probabilidades de desarrollar una pinguécula.
Otras causas pueden incluir: irritación crónica por el viento o el polvo y, a veces, el uso de lentes de contacto podría ser un factor contribuyente para que se desarrolle.
Opciones de tratamiento para la pinguécula
- La mayoría de los casos de pinguécula no requieren ningún tratamiento. Si también experimentas otros síntomas como el síndrome de ojo seco o sensación de tener algo dentro del ojo, unas gotas lubricantes podrían ayudar a aliviar los síntomas.
- Llevar gafas de sol o lentes de contacto con filtros que bloqueen los rayos UV podría ayudarte a proteger la pinguécula de nuevas exposiciones a la luz ultravioleta.
- En el caso poco probable de que la pinguécula se convierta en algo muy incómodo o se inflame, podría ser necesaria una intervención quirúrgica para extirparla.
Prevención de la pinguécula
Puedes ayudar a prevenir el desarrollo de la pinguécula usando de gafas de sol con protección UV y un sombrero cuando estés al aire libre, especialmente si pasas mucho tiempo en el agua o en la nieve.
¿Qué gravedad tiene una pinguécula?
La mayoría de los casos de pinguécula no son dañinos y solo requieren un simple tratamiento, como gotas oculares.